David MARTÍNEZ
Formación |

El mosquetón es un equipo esencial en los trabajos diarios en aerogeneradores y su uso está regulado por la normativa EN 362. Aunque es un elemento sencillo, su uso incorrecto puede tener consecuencias graves. La elección del tipo adecuado, una colocación correcta y la detección temprana de defectos son fundamentales para garantizar su eficacia y seguridad.

¿Qué es un mosquetón?

El mosquetón es un accesorio metálico con forma ovalada o en «D», utilizado principalmente para conectar el arnés del trabajador a los sistemas de anclaje mediante cuerdas de seguridad, así como para asegurar herramientas y materiales. Está fabricado en aleaciones de acero o aluminio y dispone de un mecanismo de cierre, como la rosca manual o el seguro automático bi-lock o tri-lock, diseñado para evitar aperturas accidentales.

Guía rápida de elección de mosquetones

En el sector eólico, los mosquetones más utilizados son los de rosca manual y los de cierre automático (‘lock’). Ambos tipos cuentan con mecanismos de bloqueo que evitan la apertura accidental, incluso si reciben un golpe o un movimiento brusco. Los mosquetones sin seguro están prohibidos en este entorno debido al riesgo que representan.

Errores comunes

1. Uso de mosquetones desgastados o dañados: Cualquier signo de desgaste o daño compromete la integridad del equipo.
2. Conexión incorrecta: Colocar el mosquetón en un ángulo desfavorable puede provocar una carga lateral peligrosa, aumentando el riesgo de deformación o apertura. Y
3. Fallo en el cierre del mecanismo de bloqueo: Es habitual, especialmente por prisas, no asegurar correctamente el cierre del mosquetón, dejando la puerta parcialmente abierta.

Cómo colocar correctamente un mosquetón

Para evitar fallos, siga estas pautas al colocar un mosquetón:

1. Cargar siempre sobre el eje longitudinal: El mosquetón está diseñado para soportar la carga a lo largo de su espina (parte recta). Evita cargarlo lateralmente, ya que esto reduce considerablemente su resistencia.
2. Evitar giros o torsiones: El mosquetón debe permanecer alineado y sin giros. La carga debe recaer en la espina y no en la puerta o el gatillo, ya que esto puede provocar la apertura accidental.
3. Usar cuerdas, cintas o eslingas adecuadas: Asegúrate de que el grosor de la cuerda o cinta sea compatible con el mosquetón para evitar un exceso de holgura, lo que podría generar una carga lateral inesperada.
4. Evitar contacto con superficies duras o bordes afilados: El roce con objetos duros o estructuras metálicas puede dañar el cierre del mosquetón o provocar desgaste prematuro.

Recomendaciones para mejorar la seguridad

1. Preferir mosquetones con cierre automático: Los sistemas bi-lock o tri-lock son preferibles a los de rosca manual, ya que minimizan el riesgo de que el mosquetón quede mal cerrado.
2. Inspección previa al uso: Antes de cada uso, revisa visualmente el mosquetón para detectar posibles anomalías o daños. Verifica que el mecanismo de cierre esté completamente bloqueado.
3. Sustitución inmediata ante signos de desgaste: Si el mosquetón muestra desgaste, deformación o daños, debe ser reemplazado de inmediato.

En seguridad, no se pueden tomar riesgos.